Boca vence a Vélez con un gol de Cavani y un final caliente en la Bombonera
La Bombonera vibró una vez más en una noche de viernes ideal para el fútbol. En un clima veraniego poco habitual para junio, Boca Juniors logró imponerse ante Vélez Sarsfield por la mínima diferencia, con un gol de Edinson Cavani y un cierre de partido cargado de tensión.
Desde el primer minuto, el equipo dirigido por Diego Martínez demostró su intención de llevarse el partido por delante. En apenas sesenta segundos, Boca ya había probado dos veces al arco rival, aunque sin precisión. El impacto de la charla con Juan Román Riquelme, tras la dura derrota ante Platense en la fecha anterior, parecía dar sus frutos.
El desarrollo del partido fue parejo y, por momentos, la visita tuvo momentos de dominio en el mediocampo. Con un juego rápido e intenso, Vélez logró dificultar la creación de Boca, bloqueando a Equi Fernández, el motor del equipo xeneize. Sin embargo, la movilidad de Cavani y Merentiel mantenía en alerta a la defensa visitante, generando peligro con cada avance.
Boca tuvo la chance más clara del primer tiempo cuando Cavani quedó solo en el área tras un centro de Blanco. Con el arco a su merced, el uruguayo optó por cabecear de pique al suelo, permitiendo que Valentín Gómez salvara sobre la línea. Fue una oportunidad desperdiciada que pudo haber cambiado el curso del encuentro mucho antes.
En el segundo tiempo, el equipo de Martínez retomó el control y la sensación de peligro fue constante. A esto se sumaron dos cambios obligados en Vélez por lesión, incluyendo la salida de su arquero Marchiori. La ventaja de Boca llegó finalmente con una definición precisa de Cavani, que logró romper el cero y darle tranquilidad a su equipo en los minutos finales.
Sin embargo, el cierre del partido fue de alta tensión. Con Boca defendiendo la ventaja y Vélez buscando el empate con desesperación, las fricciones se hicieron inevitables. En el tiempo de descuento, la situación se desbordó y ambos equipos terminaron con un jugador menos tras una serie de empujones y discusiones en el campo de juego.
El pitazo final fue un desahogo para Boca, que cerró el semestre sin derrotas en la Bombonera y con la confianza renovada. La victoria no solo representó tres puntos valiosos, sino también un aprendizaje clave para el equipo, que supo sostener la ventaja en un contexto de alta presión. Ahora, con el descanso previo a la reanudación del torneo, el Xeneize se prepara para encarar el futuro con mayor solidez y la esperanza de seguir sumando alegrías a su hinchada.
